En el marco de un programa de cooperación científica internacional entre la Universidad Nacional de Río Cuarto y el Departamento de Botánica de la Universidad de Leibniz, Hannover (Alemania), 50 ejemplares de retortuño (strombocarpa strombulifera), provenientes de las Salinas del Bebedero de San Luis serán estudiadas en Argentina y Alemania para conocer adaptaciones morfológicas y fisiológicas a condiciones extremas en la flora nativa argentina, el impacto de la salinidad por cloruros y sulfatos en halófitas sudamericanas, y el análisis de estudios bioquímicos, fisiológicos y moleculares comparativos de tolerancia a la sal.

Un equipo técnico de la UNRC, encabezado por la investigadora del CONICET Mariana Reginato recolectaron vainas/frutos de retortuño (strombocarpa strombulifera), arbusto nativo que crece en condiciones de alta salinidad en la zona cercana a Salinas del Bebedero. La Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, a través de su oficina de Flora, supervisó el proceso y cumplimentó la documentación necesaria para la colecta y transporte del material vegetal hacia tierras cordobesas.

El objetivo del estudio de la UNRC es dilucidar la base genética que subyace a la tolerancia diferencial a cloruros y sulfatos para obtener marcadores moleculares de tolerancia a utilizarse en mejoramiento genético de especies leguminosas cultivables de importancia agrícola.

En Hannover serán iniciados estudios por posibles aplicaciones medicinales del retortuño. Si bien, popularmente se emplea para dolores de muelas, inflamaciones de garganta y hasta afecciones renales; la Universidad Nacional de Cuyo de Mendoza avanzó en 2014 en neutralizar y hasta incluso matar células cancerígenas (cáncer de colon).

Esas propiedades curativas, más las investigaciones precedentes, serán motivo de análisis y de nuevos ensayos en tierras germanas de una planta arbustiva característica de los salitrales sanluiseños que puede esconder múltiples aplicaciones. De las Salinas del Bebedero, al mundo.