El animal sufrió la amputación de uno de sus miembros y fue asistida por la veterinaria del Centro de Conservación de Vida Silvestre, Julieta Poggi. Desde Ambiente realizan advertencias sobre la situación.
No es la primera vez que se repita una lamentable situación, donde perros y otros animales domésticos interactúan con animales silvestres o que no debieran estar mascotizados. No siempre atacan, también son atacados y han sufrido lesiones.
La pequeña tortuga ha sido mutilada, pero se recupera gracias a la asistencia veterinaria. Una decena de tortugas terrestres integran el plantel permanente de la Reserva Floro Faunística de La Florida. Es importante remarcar una problemática entre los animales domesticados y los silvestres que buscan reinsertarse en su hábitat: la transmisión de enfermedades y parásitos, fruto de esa interacción.
Las tortugas no son mascotas. Ninguna. Nunca. Para poder ayudarlas, es muy importante que todos sepamos esto: son animales capturados de la naturaleza, pueden ser portadoras de enfermedades. Son una gran responsabilidad: viven muchos años y requieren cuidados especiales. Solo 1 de cada 10 animales, sobrevive al tráfico ilegal. La mejor manera de detener el tráfico es cortar la cadena. No compres y denunciá su venta ilegal.
De la misma manera ante la presencia de otro animal silvestre, que represente un riesgo, o se tenga conocimiento que es víctima del tráfico ilegal, se debe dar aviso llamando a al área Fauna de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable a los teléfonos 0266-4452000, interno 3372, o bien con la Policía Ambiental (911)